Innovación

1.- Originalidad:

La transformación debe introducir cambios significativos y originales en la empresa, ya sea en sus procesos, productos, servicios o modelos de negocio. Debe ir más allá de simples mejoras incrementales y ofrecer una solución única o una nueva forma de abordar los desafíos empresariales. 

2.- Valor añadido:

La transformación debe agregar valor tangible a la empresa, ya sea en términos de eficiencia operativa, calidad del producto o servicio, satisfacción del cliente, reducción de costos, aumento de la rentabilidad o cualquier otro resultado positivo medible. 

3.- Impacto:

La transformación debe tener un impacto significativo en la empresa, ya sea a nivel interno (cambio cultural, mejora de procesos) o externo (mejora en la experiencia del cliente, aumento de la cuota de mercado). Debe generar resultados medibles y demostrables que contribuyan al éxito a largo plazo de la empresa. 

4.- Adopción y Difusión:

La transformación debe ser adoptada y difundida en la empresa de manera efectiva, con la participación activa de los empleados en todos los niveles y la integración exitosa de los cambios en la cultura organizacional. Además, debe tener el potencial de ser replicada o adaptada por otras empresas en el mismo sector o en diferentes industrias. 

5.- Innovación Tecnológica:

Si la transformación implica el uso de nuevas tecnologías o herramientas, estas deben representar avances significativos en comparación con las soluciones existentes. Deben ser disruptivas y proporcionar ventajas claras sobre las tecnologías anteriores.